¡Arrepiéntete Cipriani!

Hace ya una semana que no publicaba nada y quizás mas días hubieran transcurrido así si no fuese por la indignación y vergüenza que me produce tener como representante máximo de la Iglesia Católica del Perú a Monseñor Juan Luis Cipriani. Ya no solo son sus desafortunados comentarios con "ajos" y "cebollas" que comparte con sus capturadas audiencias fuera de cámaras y lejos del público, tampoco son solamente sus agresiones a la Pontificia Universidad Católica del Perú - mi alma mater -, ni son sus ofensivos mensajes a las madres gestantes que no desean tener mas hijos invitándolas a que los regalen a "su iglesia", o su posición frente a quienes estando ya casados desean tener sexo pero con la protección mínima de un preservativo, y menos es mi incomodidad por verlo fumar un cigarrillo cuando debería ser el primero en dar el ejemplo de como cuidar nuestros cuerpos divinamente dados a concesión a todos nosotros - favor de notar el tufillo sarcástico en mi ultima oración. No! No son estos hechos individuales los que me llevan a publicar este post, son todos en conjunto sumados a las razones que expone el sacerdote Hugo Cáceres Guinet frente a la reciente remoción del permiso de enseñanza de la Biblia al padre Eduardo Arens - gracias a Ingrid Soria y lamula.pe. Es decir, ya fue suficiente. Estoy harto de su hambre de poder y poco comportamiento cristiano. Por eso desde aquí le envió un mensaje bien claro: ¡Arrepiéntete Cipriani!

No pretendo iniciar una campaña, pero me gustaría que ocurriera. Una en la que otros blogs y demás sitios sociales en la red le mostramos a Cipriani que estamos en total desacuerdo con su proceder y exigimos por lo menos que se arrepienta de sus actos, pida perdón a los agredidos como el padre Arens, sus compañeros de sotana, en fin a la ciudadanía en general. Espero se entere y aunque no espero se comunique conmigo al menos que si preste atención y comprenda que esta aún a tiempo de corregir el camino antes que sea demasiado tarde y el pueblo entero pida su reemplazo.

Creyentemente.