Wednesday, July 7, 2010

A cocachos aprendí

¡Ah! El Día del Maestro. ¿Si no fuera por los maestros que seria de la sociedad? Claro, aquí me refiero a los buenos maestros, a los que tienen dedicación, a los que van mas allá del deber que su trabajo les exige, a los que son conscientes que están forjando las nuevas generaciones que algún día llevaran las riendas del país y por que no del mundo. A esos maestros son a los que hay que celebrar y recordar.

De mi parte, mi aprecio y agradecimiento va a estos maestros que fueron parte fundamental en mi instrucción y también en mi educación. Empezare con Leopoldo "Loco" Merino, un gran profesor de Historia del Perú en mis años de estudios secundarios en el Colegio Claretiano de Lima, si no fuera por él quizás mi promoción no sabría tanto de la historia nuestra y probablemente no amaríamos tanto a nuestra patria. Para muestra esta el vídeo de la clase magistral que dio a una promoción bastante anterior a la mía (no te rías). Espero que el "Loco" este disfrutando su bien merecido retiro.



El profesor Medina, de quien lamentablemente no recuerdo su primer nombre, fue un genial profesor de Matemáticas (solo pude ubicar esta única mención) quien nos logro despertar un inesperado interés en la geometría y trigonometría en mis primeros semestres en la Pontificia Universidad Católica del Perú. Lastimosamente los azares del destino se lo llevaron trájicamente a comienzos de la década de los 90. Sus clases eran lleno completo, gente sentada en las escaleras, en el suelo, con colas esperando se abran las puertas del salón como si estuvieras ahora asistiendo a un concierto de los Jonas Brothers. Si no aprendías con él, entonces era mejor que re-evaluaras tu vocación.

Los profesores Richard H. Gordon (ya en retiro, ir a la página 18 de este catalogo) y Bala Ravikumar nos mostraron la pasión que puede despertar la creación de software bien codificado, ante sus ojos es como escribir poesía, poder plasmar en perfecta armonía la ejecución de un algoritmo sin importar realmente el lenguaje de programación que se escoja. Sin su guía desinteresada quizás me habría dado por vencido hace mucho tiempo. Para terminar no puedo dejar de mencionar a quien aun considero mi maestro aunque yo ya no practico Goju Ryu (estilo de Karate Do): Sensei Juichi Kokubo. Aunque he dejado de mencionar a varios otros maestros importantes, tanto de la escuela y universidad, ellos saben quienes son. A todos, simplemente ¡Muchas Gracias!

Educadamente.

2 comments:

  1. Renato, el nombre de Medina era Arnaldo; que se fue junto con Rea. Que en paz descansen.

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  2. Eso! Que bueno que lo recuerdas: Arnaldo Medina... que maestro! si no hubiese sido por él me habría cambiado a Letras... jajaja!!!
    Ahora, con el nombre de pila, pude ubicar otra referencia (con cariño) hacia su persona aquí:
    http://martintanaka.blogspot.com/2007/03/la-generacin-de-los-80-en-la-pucp-y-el.html

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